Publicado el Deja un comentario

Epilepsia: una enfermedad común en perros y gatos. Parte 1.

Epilepsia: una enfermedad común en los perros y gatos.
Epilepsia: una enfermedad común en los perros y gatos.

Epilepsia: una enfermedad común en perros y gatos.

Parte 1.

Escrito por Dra. Jesmir Varona Socias

Doctora en Medicina Veterinaria y Periodista

Epilepsia: una enfermedad común en los perros y gatos. Parte 1

La epilepsia es una enfermedad que afecta al sistema nervioso central produciéndose una sobre-estimulación neuronal y sobrecarga. Su presencia provoca los llamados ataques epilépticos, con síntomas evidentes como las convulsiones, salivación espumosa y abundante, y pérdida del conocimiento.

Este desagradable cuadro nervioso, puede presentarse tanto en perros como en gatos, aunque no es igual en ambos casos y es menos frecuente en los gatos.

Por eso en este artículo te daremos las claves y tratamiento de la enfermedad, hoy sólo en los felinos.

Qué es la epilepsia en los gatos

La epilepsia es una patología física provocada por una alteración esporádica de un grupo de neuronas. En gatos no es muy frecuente, pero se puede dar mediante crisis epilépticas. Las crisis se desencadenan cuando se produce un exceso de actividad eléctrica de un grupo de neuronas hiper-excitables en el cerebro. Como consecuencia, el comportamiento, el movimiento y el nivel de conciencia del gato se puede ver afectados de manera exagerada.

Causas de la epilepsia en gatos

La epilepsia en gatos aparece de forma idiopática, es decir, sin motivo aparente o debido a estímulos y enfermedades.

Algunos gatos tienen predisposición genética a la epilepsia y otros la presentan por razones múltiples como; la falta de oxígeno al cerebro o daños en el tejido nervioso.

Las alteraciones más comunes que pueden producir epilepsia en gatos, son:

  • Cáncer (tumores).
  • Malformaciones congénitas o adquiridas de los vasos descendentes o ascendentes.
  • Inflamaciones en el cerebro, como la encefalitis o la meningitis.
  • Lesiones y traumatismos craneales.

Además, la epilepsia puede tener su origen fuera del cerebro. Puede estar provocada por alteraciones asociadas al sistema nervioso y entonces se tratará de una epilepsia extra-cerebral.

En esos casos, las razones que pueden provocarla son:

  • Intoxicaciones.
  • Trastornos metabólicos.
  • Falta de vitaminas o nutrientes.

Síntomas de la epilepsia en gatos

Hay cuatro fases en las que se dividen los ataques epilépticos y los síntomas son bastante diferentes entre ellos.

  1. Fase prodrómica. Aparece desde unas horas antes hasta días antes, de que llegue el ataque. Se caracteriza por una
    agitación muy evidente en el animal.
  2. Aura. El comportamiento del gato en esta fase puede variar según el ejemplar. Mientras algunos pueden mostrar agresividad o recelo frente a su familia, otros se muestran muy deseosos de estar cerca de las personas.
  3. Ictus. Describe el ataque de epilepsia como tal.
  4. Fase posictal. Es el momento de recuperación. En esos momentos, los gatos se quedan agotados y duermen mucho.


Además de lo mencionado, debo detallar algunos signos que se presentan durante el momento del ataque epiléptico en sí, incluso, durante las otras fases.

  • Inconsciencia.
  • Nerviosismo.
  • El gato estira todos sus miembros dejándolos muy rígidos.
  • Alucinaciones. Pueden reflejarse en mordiscos hacia sí mismo, huidas, maullidos constantes.
  • Caídas repentinas.
  • Contracciones musculares.
  • Convulsiones de los músculos.
  • Evacuación involuntaria de orina y heces.
  • Incremento de la salivación.
  • Movimientos masticatorios.

Las crisis epilépticas normalmente solo duran unos segundos o minutos. Luego, el cerebro del gato vuelve a funcionar con normalidad.

Por eso recomendamos dejarlo tranquilo, si no estuviera demasiado agitado, podemos pasar la mano por sus miembros para aliviar las contracciones musculares. Sé que resulta impresionante asistir a una crisis epiléptica de nuestros amigos, pero ayudarlos con un tratamiento y asistirlo durante la fase tensa puede hacer más llevadera su enfermedad, que es permanente e irreversible.

Tratamiento

El tratamiento de la epilepsia felina depende de la causa originaria de la misma. Por ello es tan importante la intervención veterinaria y su capacidad para determinarla.

La mejor terapia suele consistir en eliminar o corregir el factor causante si lo hubiese. Además, hay que tener en cuenta el grado de lesión cerebral residual o preexistente, pues este puede perdurar aunque se elimine la causa que le dio origen.

En cuanto al tratamiento de la causa principal:

  • En caso de traumatismo, se puede proceder a una intervención quirúrgica.
  • Para las infecciones bacterianas se suele recetar antibiótico.
  • Los tumores son tratables con radioterapia o quimioterapia.

También se podría extirpar en ciertos casos.

Cuando se desconocen las causas de la epilepsia en forma idiopática, se suele recomendar la administración de barbitúricos.( el fenobarbital, carba-macepina, entre otros)

Pronóstico

El pronóstico del gato que sufre epilepsia dependerá de la causa y el grado de afectación en el que se encuentre el felino. Por desdicha, no es curable, pero sí, con el tratamiento adecuado, se puede proporcionar una buena calidad de vida al animal.

¿Qué puedo hacer si mi gato sufre un ataque de epilepsia?

Es muy importante actuar adecuadamente, si notas que tu gato está sufriendo un ataque epiléptico para no empeorar sus efectos, causar daño al animal o sufrir alguna lesión:

  • Mantén la calma en la medida de lo posible. Sabemos que es un momento complicado, pero es importante actuar con serenidad para no cometer errores.
  • Evita los golpes. Procura que, durante el ataque, el gato no se golpee o se caiga. Retira de su alrededor todo aquello con lo que podría chocar.
  • No intentes sacar la lengua de su boca. Podría acabar mordiéndote sin querer.
  • Si el médico ha recetado y explicado las pautas a seguir con una medicación, para estos casos y no es la primera vez que se presenta una crisis, cumple con sus indicaciones.

Lo que no debes hacer

Cuando un gato sufra epilepsia o convulsione, deberías evitar:

  • Tapar al gato o darle calor: podría empeorar, especialmente si ya le está faltando el aire.
  • Darle agua, comida o un medicamento durante el ataque, ya que podría ahogarse.
  • Sujetarle con fuerza. Mucho cuidado, especialmente, con la cabeza. Podría fracturarse el cuello.
  • Aunque el gato pudiera tener mucha sed o hambre tras el ataque, es mejor retirarle los platos, hasta que detectes que ha recuperado por completo los reflejos. Si come tras la epilepsia, podría tener problemas con la deglución.

Todo gato debe vivir en un entorno tranquilo. Solo así se pueden evitar problemas como el estrés o la sensibilidad. Pero también es fundamental en felinos que sufren epilepsia, pues el malestar del entorno puede actuar como detonante del ataque epiléptico.

Mis consejos

Aunque el tema de este articulo no es agradable y puede causarte alguna impresión desagradable, es bueno saber que puede ocurrir a tu felino y estar preparado, pues con la guía de tu veterinario, un buen tratamiento y un hogar tranquilo, nuestro amigo peludo enfrentará la epilepsia tal como hacen los humanos que la padecen y seguir adelante con calidad de vida. Tenlo en cuenta.

Portal de Productos para tu Mascota👇:

540 2

Superpet Omega 3 y 6 para Gato 125 ml

Los ácidos grasos Omega 3, proporcionan una fuente natural de protección para el funcionamiento del sistema nervioso, cardiovascular e inmunológico. Por su actividad antioxidante, ayuda a retardar los procesos propios del envejecimiento. 

Un producto de Drag Pharma, Laboratorios.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *